Huyendo de meteos indeseables, íbamos salvando día a día lo que parecía un infierno de lluvias (según Internet) y ni una gota (según la realidad). Así que de Canfranc nos pasamos al Valle de Aspe y vamos al bivac de Cette Eygun, con lavabo, mesas y pradito, chollo.
Remi no ha estado nunca en la Mature, a mi me quedan muy pocas vías (de las largas) para hacer, así que le está bien cualquiera, perfecto.
Vamos a Pablo Dans le Gaz, continuando por Christophol Colomb hasta las viras de descenso.
Al pie de la Pablo encuentro a un conocido que me comenta que no se escala muy a menudo, no es clásica. Mejor, le respondo, así no patinará.
Ya se nota, por la cantidad de matojos que hay en algunos puntos. En el L1 tengo que podar unos cuantos bojes para poder pasar y llegar a la fisura salvadora. Este largo es el más chungo, con diferencia, y te pilla en frío. La vía transcurre alternando los tramos buenos con los matojeros: a lo que estamos habituados, vaya.
Y llegamos al L4, lástima que sea tan corto, un diedro perfecto, vertical y desplomado, con todas las posturas posibles y bastante a equipar. Roca buenísima y algún paso inverosímil. Diría que sólo por estos 20 metros vale la pena hacer la vía. No obstante, si lleváis el serrucho haréis faena.
Bajamos por las viras, un poco pesado y en las que debes estar muy atento para no errar el itinerario.
Nosotros, para variar, lo erramos, y cuando ya no tenemos salida, volvemos a remontar hasta re-encontrar el itinerario correcto, menos mal.