Superclásica del Campana y que aún o había escalado. Esta vez, y aprovechando mi estancia tacha-clásicas para el próximo libro que estoy preparando estaba en el programa.
Hacemos dos cordadas y nos dirigimos pronto para la base, Extrañamente hoy seremos los únicos en la montaña ...suele haber gente casi siempre en esta vía.
Tras el primer largo la cosa se difumina y es fácil liarse y confundirse un poco...o mucho.
Nos liamos un poco pero enderezamos rápidamente y alcanzamos el inicio del espolón definido como tal.
La escalada es preciosa, vertical, con buena presa y buenas posibilidades de aseguramiento, pero un poco demasiado pulida por el paso de gente, una verdadera pena. Aun así mantiene parte de su encanto y todo el ambiente de antaño.
El caso es que nos lo pasamos genial y llegamos al final a una hora bien razonable.
Y mañana será otro día.
Con Esther, Alex y Alfons.
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