Quedo con Salla y le hago varias propuestas. Triunfa la Paret de Portaclusa, situada por debajo de Corçà, justo sobre el pantano y en un lugar realmente bonito y sugestivo.
La idea inicial es hacer la Tasconaires y la Savinaires.
Comenzaremos por esta última.
En el rápel le echamos un vistazo al tremendo montaje de escaleras y palos que se alza a nuestra izquierda. Realmente curioso, si alguien sabe su utilidad, me haría mucha gracia conocer el porque de tamaño montaje.
Buscamos el inicio y paso por un lugar que se parece un poco a la reseña, pero lo descarto por cutre. Tras eliminar posibilidades resulta que es por allí. Puaaaj.
Intento rajarme y pasar de esta vía, yendo directamente a la siguiente, a ver si es algo mejor. Victor me insta a que no lo haga y que la intentemos a ver si más arriba mejora.
Estricto sorteo con pajitas y me toca empezar, que ilu.
Ya me veo el marrón, hacía días que no hacía nada tan guarri-cutri-expo. Tierra, matojos a a saco, roca suelta, blocarros, más tierra y mucha más tierra.
Casi me quedo a vivir allí, no se cuanto rato me paso para superar los interminables 45 metros, pero mucho. Modo ralentí y asegúrate cada paso, limpiando constantemente las presas de tierra, tanto de manos como de pies.
No me bajo, porque nada me merece la suficiente confianza para ello y dejar un friend no es lo suyo.
Total, que tras mil quejas y sentires, al final llego a la role. No me lo creo ni yo.
Parece que mejora, y si que lo hace, aunque sigue siendo bastante cutre.
A pesar de algunos pasos interesantes y guapos, la roca descompuesta se impone hasta la misma cima.
Aprovechamos para tirar abajo un buen montón de lajas y bloques sueltos, ahora es otra cosa, pero aún así id preparados para una aventura salvaje.
Llegamos arriba a las 3 de la tarde y, la verdad es que no me apetece ni lo más mínimo volver a meterme en un marrón semejante. Salla prueba de convencerme, pero tampoco me cuesta demasiado que se decida por la birra y las bravas.
No se como será la Tasconaires, pero esta, buf, no se si volveré a por ella. Quizás el invierno próximo cuando ya no me acuerde del mal trance.
No se que pasa con Salla, que lo poco que hemos escalado juntos (Savinaires, Xemeneia Encantada, Avi) son vías de coleccionista, rollo cutri-climbing. A ver si la próxima nos sale buena.
PD: hay una familia de cabras en las feixas de inicio. Debieron engrar ahí cuando el pantano estaba tan bajo (hace un par de años) y ahora no pueden salir. Al menos tienen comida y agua en abundancia.