Tras un viaje
por pista, increíble, llegamos a Al Hamra. Sus torres presiden el centro de un
amplísimo valle. Repartimos vías y cordadas y nosotros nos decantamos por la
más fácil y super-clásica en atendant les lents. Vía abierta en solo y equipada
con posterioridad.
Una verdadera
maravilla, con la calidad de roca bestial que hemos venido a buscar aquí.
Ambiente asegurado y belleza en todos sus largos. Cuando termina, realmente te
gustaría que continuase otros 200 metros.
Tanto esta como
la mama, que realizan otras dos cordadas son muy pero que muy recomendables.
Con Alberto y
Chavi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario