Este invierno
apenas estoy escalando ninguna vía larga, salvo alguna esporádica escapadita
hacia el Montsec y alguna tontería cerca de casa.
Por otro lado
está resultando medio prolífico en equipamientos de escalada deportiva, tema
que tenía bastante olvidado últimamente.
Ese día quedo
con un montón de Galls (Yoli, Pepe, Jesús y Cesar) en Àger con el objetivo de hacer una de las nuevas vías
abiertas por David Hita.
A esta ya le
hice un intento la semana anterior, pero el frío nos hizo desistir y
orientarnos hacia tierras mas bajas. Sin contar la rotura del carter en la
pista.
Ser
ía una de mas si no fuese por los 180 metros de travesía que nos depara
desde su R2.
Increíble además
que no cruce ni una sola vía abierta con anterioridad. Únicamente dos recientes
itinerarios, también de David y de los que, por el momento, no tengo mas
información.
Pero prometen.
La verdad es
que, personalmente, me ha parecido buenísima, con gran ambiente en la travesía
y todos los largos interesantes por uno u otro motivo.
En un momento
dado se une a Inquietud de Quietud, de la que aprovecha su mejor largo y, esta
si, que la cruza lo mas discretamente posible.
Para mi, de lo mejor
de la pared y que, cuando se conozca, debería convergirse en clásica porque se
lo merece.
Me olvido la
cámara y solo dispongo de las fotos que me hizo mi compañero de cordada: Cesar.
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