
Un curioso boulder, que realizaba la juventud del pueblo de pequeños, era atreavesar todos los mallos, a poca distancia del suelo, buena forma de pasar la tarde y hacer muchos metros.

Abrir vías y dejarlas medianamente equipadas requiere de bastante material. Este no resulta nada barato, especialmente los clavos. En grandes paredes lo correcto es aprovechar las posibilidades naturales que nos ofrece la roca y no colocar expansiones junto a fisuras. La colocación de fisureros o friends medianamente fiables no siempre es posible y entonces los clavos ocupan su lugar.
Si tienes algunos (o muchos) clavos del tipo que sean: planos, v, u, grandes, pequeños, escarpias, viejos, nuevos, muy viejos (todo sirve) que no uses (ni vayas a usar) y quieres donarlos. Nosotros les encontraremos su lugar en la pared.
Muchas gracias por tu colaboración.
Mail de contacto : luichy@lanochedelloro.es
Ji ji qué buena la foto del Aguililla Real, cuando la deportiva empezaba a sonar ya estaba allí montando el nido...
ResponderEliminarDe paso decir que hay varios bordillos más a la izquierda, bueno bordillos de 70 m ... de séptimo grado en los que hay que estar al loro y hacer un poco de película para desmontar.
Ale un saludo
Me suena gomollón ese zagalico....
ResponderEliminarsaludotes
Carlos Soneman
Qué bien! Por fin me entero cómo se llama mi primer 7b! Hasta ahora 'el de las chapas blancas'
ResponderEliminarGracias Luichy
Santi: Pon reseñas de esos 'bordillos'...