




En este caso aparecen fotos del sector izquierdo.
Tenemos un sinfín de bellísimos itinerarios para elegir, con roca que varía entre buena e increíble y el único handicap de que podemos encontrar itinerarios patinosos, más cuanto menos grado tiene la vía. Esto nos hace intuir que difícilmente estaremos solos.
Las aproximaciones, cortas y cómodas y la cercanía del pueblo, hacen posible una curiosa combinación: escalas por la mañana en una pared, te vuelves al coche en 5’ y dejas los trastos, tapitas y vermout en uno de los baretos del pueblo (sin necesidad alguna de coger el coche) y vuelta a la faena en la pared del otro lado. El día te deja un regusto, por lo menos, curiosillo.
En las imágenes, nos deleitan Alvar, Txenxo, Pinxo y algún anónimo que se puso a tiro, gracias a todos ellos.
jejeje...que bien entro la cervecita.
ResponderEliminarY lo guapetón que quedaste en la foto.
ResponderEliminarUno que que lo es...jejeje.
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