Hace poco hicimos una excursión en la Sierra de Guara. Llegar hasta el Monasterio de San Martín de Valdonsera. Comienzas por un barranco, para desviarte al paralelo, pues el primero se cierra. Después asciendes hasta la cima de la montaña que separa ambos (vía ferrata) y vuelves a bajar al primero. Todo el rato transcurre entre rocas de buena calidad dónde la escalada aún no se ha desarrollado y con grandes posibilidades tanto para deportiva como para vía larga. Por el momento cuenta únicamente con unas pocas deportivas difíciles y dos largas de Ravier y cía (acompaño reseñas), también difíciles y expuestas. La primera que te encuentras transcurre por una extensa franja rocosa de 150 metros de altura y con una roca excelente e inmensas posibilidades.Tras subir arriba de la montaña, se alza ante nuestros ojos la majestuosa Peña del Mediodía. Toda una serie de mallos, dispuestos en paralelo a modo de grandes espolones e inmensas canales que se precipitan directamente al barranco, todo un espectáculo…y con sólo una vía. Eso si dos horas de pateo, aunque con la posibilidad de pernocta sauvage en el monasterio.
Para comenzar topamos con una batida de jabalís. Ellos para abajo y nosotros para arriba (menos mal). Hasta que aparecieron dos perritos perdidos, con sus cascabeles, mosqueo. Menos mal que no aparecieron cazadores. Al llegar frente a la Peña del Mediodía y mientras flipaba con sus posibilidades: patapouuum, al rato patatatapooouuum, al rato patapumpantumtum. Constantes desprendimientos de las enormes estalactitas de hielo situadas en la parte alta, y que al tocarles el sol se precipitaban directas al barranco. Todo un espectáculo, lástima que la última parte del camino pasara justo por uno de los puntos de mayores impactos. Cagaitos vivos, nos decidimos a pasar bien rápido y con la mochila en la cabeza, algo haría. Al poco de atravesar la zona crítica patapapuuuum. Buaaaa nen, que miedo, y aún hay que volver. A la vuelta lo mismo, confiamos en la suerte de habernos encomendado a la virgen de la Ermita y salió bien.
Que no se enteren de esto los guardas.
ResponderEliminarEl secretivo está situado justo encima de un pequeño yacimiento prehistórico ya excavado y las vías de Ravier... bueno, la normativa del Parque ahí está para el que la quiera cumplir.
Sobre el secretivo no digo practicamente lo más mínimo, ahora me entero que es tal.
ResponderEliminarSobre las vías de Ravier, había un cartel que limitaba la época de escalada fuera de los meses de nidificación. No parece que haya mayor problema.