Nos hallamos
inmersos en plena hola de calor, aquello bestia. Aunque tras unas lluvias
parece que el ambiente se ha refrescado un poco. Tengo que bajar a las
cercanías de Lleida, así que intento cuadrar una vía a la sombra en Àger y
quedo con Cesar. De creación muy reciente, la Tarde para la Ira es una línea
que ya tenía hojeada para abrirla desde hacía años. Pues ya la han abierto, así
que se impone probarla.
Queda a la
sombra hasta las 2 de la tarde, pero aún así, en Àger, igual hace mucho calor.
Al final y
gracias a la sombra y el viento, pasamos frío y estamos deseando llegar arriba
y que nos toque el sol.
La vía resulta
muy buena, sobre excelente roca y casi toda en placas de rallitas, con alguna
fisura puntual.
Equipada
generosamente para pasar el mínimo miedo posible, eso sin llegar a los excesos
que se ven en otros lugares.
Muy recomendable
y que seguro se repetirá con asiduidad.
Si la vais a
repetir, atención puesto que justo a su derecha hay una vía nueva, de creación
aún más reciente.
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