PARED DE ARAGÓN - LOS CUARENTONES

 Los Cuarentones es una de aquellas vías que, en cuanto la abrieron, sentimos la imperiosa necesidad de repetirla. Tenía que ser buena por fuerza y lo era. Recorre un terreno variado con un largo especialmente monolítico y dominio de las placas. Sin olvidar el típico diedro de salida.

Cuando llegamos a la cima del Montsec de l’Estall, durante la aproximación, vimos una chica francesa que esperaba a sus amigos. Nos dijo que en la vía estaba Bunny, el que fuera incorregible cazador de segundas ascensiones, que estaba en la vía con unos clientes. La ley de Murphy no fallaba, toda la pared vacía y todos en la misma vía.

Confiamos en la maestría de Rainier para escalar veloz, incluso llevando clientes y no nos defraudó. Hasta que llegamos al largo monolítico con sus pasos de gancho y sus tramitos obligadotes. Allí primero Bunny se afanaba por pasar en libre y después sus seguidores por pasar como pudieran. Pequeño embotellamiento. Pero tuvimos la suerte de que la reunión era una profunda y perfecta cueva en medio del inmenso muro, dónde podías estar hasta sin cuerda. Nos echamos una pequeña siestecilla de una horita y, cuando toda la troupe desapareció de la placa, le dimos. Que maravilla de roca. Al final, un diedro de V teórico, ya nos dejaba en la cima. Se veía curioso para ser sólo V. Lo dejamos en un buen 6a (nadie se ha quejado) y salimos rumbo al bocatajamónserrano.

Por cierto, el tiempo pasa y ahora ya son los cincuentones. Al inicio he añadido una foto del Donn, durante la apertura, en la cueva.