La arista del Tossal de Sant Salvador estaba claro que había que subirla un día u otro, es demasiado evidente, demasiado vistosa desde todos los puntos de Escales. En cuanto a la autoría de la primera ascensión, no estaba del todo clara y sigue sin estarlo al 100 % puesto que años antes podría haber subido alguien, pero de momento doy por buenos los datos reflejados en el croquis.
Las referencias que teníamos eran a partir del collado, o sea que únicamente se escalaba con cierta asiduidad la parte de arriba. Así lo hicimos Dídac y yo. Lo que pasa es que llegados al inicio vimos que la cresta venía de más abajo y que la pinta no era mala. Bajamos a mirarla pero el material quedó arriba, así que regresamos a pie y escalamos la parte superior. Al cabo de un par de día regresamos, subiendo la zona de abajo, más de lo mismo y una excelente alternativa para alargar la escalada, lo más lógico por otro lado. Alguien ya había subido por allí, a juzgar por el clavo que encontramos. Merece la pena hacerla entera, ya puestos.
En conjunto es una escalada de crestas sin ningún compromiso, de fácil abandono y poca dificultad (salvo algún punto en concreto). Las vistas son sensacionales en todo momento.
Habrá a quién le gustará y a quién no. Personalmente este tipo de cosas no es que me gusten demasiado, pero de tanto en tanto voy.
La arista del Tossal de Sant Salvador estaba claro que había que subirla un día u otro, es demasiado evidente, demasiado vistosa desde todos los puntos de Escales. En cuanto a la autoría de la primera ascensión, no estaba del todo clara y sigue sin estarlo al 100 % puesto que años antes podría haber subido alguien, pero de momento doy por buenos los datos reflejados en el croquis.
Las referencias que teníamos eran a partir del collado, o sea que únicamente se escalaba con cierta asiduidad la parte de arriba. Así lo hicimos Dídac y yo. Lo que pasa es que llegados al inicio vimos que la cresta venía de más abajo y que la pinta no era mala. Bajamos a mirarla pero el material quedó arriba, así que regresamos a pie y escalamos la parte superior. Al cabo de un par de día regresamos, subiendo la zona de abajo, más de lo mismo y una excelente alternativa para alargar la escalada, lo más lógico por otro lado. Alguien ya había subido por allí, a juzgar por el clavo que encontramos. Merece la pena hacerla entera, ya puestos.
En conjunto es una escalada de crestas sin ningún compromiso, de fácil abandono y poca dificultad (salvo algún punto en concreto). Las vistas son sensacionales en todo momento.
Habrá a quién le gustará y a quién no. Personalmente este tipo de cosas no es que me gusten demasiado, pero de tanto en tanto voy.
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