La Cala Magraner curiosamente tampoco aparecía en esta primera guía de la isla, aunque si en la de los guiris. Cosas de la vida.
La escalada en si, estaba bien, pero las vías tampoco nos parecieron demasiado maravillosas, ¿un poco cortas quizás? El mayor atractivo del lugar era que, tras 20 minutos de bajada, llegabas a una cala solitaria, sin gente, sin casas y sin carretera, todo un lujo. El ambiente era de lo más playero y agradable para los que vivimos todo el año en las frías montañas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario