Hace unos meses
ya me habló Oriol de este itinerario en Els Encantats y quedamos para repetirlo
a su vuelta de Pakistan.
Dicho y hecho.
Cuadramos un día y nos juntamos una cordada de tres: Nadia, Oriol y Yo para
repetirla.
Inicio en un
muro de granito, difícil, vertical y desplomado, de aquellos que ya te ponen a
100 nada mas empezar el día. Menos mal que es lo mas difícil con diferencia, el
resto no tiene nada que ver. Estaría bien algún día hacerle una entrada mas a
la derecha por terreno mas sencillo, que existe y así homogeneizarlo con el
resto del recorrido.
Tras un largo
tramo boscosos ya entramos en materia y comenzamos la arista propiamente dicha.
La vía asciende
de forma directa una marcada arista-espolón situada inmediatamente a la derecha
de la canal central. Es una escalada muy larga en la que encontraremos de todo:
tramos de placa con muy buena calidad y otros bastante trinchados, por lo
general cuando es mas difícil la roca es buena o muy buena. También hay que
decir que predomina el terreno cutre.
En todo caso es
un gran itinerario, con ambiente supremo y defendido por profundas y tenebrosas
canales que no invitan en absoluto al abandono.
A pesar de su
poca dificultad no subestimarla en absoluto, se trata de una “grande course”
que podría llegar a convertirse en una gran clásica. Ingredientes los tiene:
equipamiento fijo, ambiente, longitud y va a parar a una de las cimas mas
carismáticas del Pirineo Catalán.
Nosotros
estuvimos 12 horas de Sant Maurici a
Sant Maurici, contando paradas, arreglos varios en la vía, aproximación,
descenso y agradables tertulias en las reuniones.
Una buena
actividad en pleno corazón de Sant Maurici, muy recomendable para almas
inquietas y todo-terreno.
Nota: esta
actividad la hicimos el verano pasado, este estoy con una fuerte lesión en el
pie que apenas me permite caminar por lo que toda la temporada queda relegada a
actividades cerca del coche y equipamientos/reequipamientos diversos.