lunes, 13 de octubre de 2014

PEÑA MONTAÑESA - ARISTA PERET

Cuando hicimos la Pater Misericordia, fue inevitable que el ojo escrutara minuciosamente toda la zona, escaneando sin piedad cada recodo de la pared, cada posibilidad de novedad y la dificultad que ello supondría. Así de entrada, y ciñiéndonos exclusivamente a esta roca (otra cosas son las circundantes) fotografié con el ojo y con la cámara algunos motivos interesantes. Una de las premisas fundamentales era buscar alternativas bastante asequibles, sin mucho trabajo, lógicas y que no exigieran hacer fuerza, puesto que el horno no está para muchos bollos. De entrada lo que más canta es la arista de la derecha. Me la miré desde todos los lados y se intuía un itinerario extremadamente evidente, con buena roca y bastante fácil. Una de aquellas que no te explicas porque no se ha subido aún. Bueno si, pero no viene al caso. Como siempre, sólo había que esperar el día, las circunstancias, la motivación y el compañero ideal para la ocasión. Los días de vacaciones de Rogelio parecían una buena excusa para extraerle uno y pasarlo en la sombría vertiente norte de la Peña Montañesa. Tras un rato mirando por dónde entrarle, nos decidimos por aprovechar la parte más baja y justo por el filo. Los largos se suceden de manera natural y armoniosa, buscando siempre el filo de al arista principal por su parte más asequible y con mejor roca. El resultado final no es el esperado aunque tampoco está mal. Mi balance personal es bueno y me pasé una jornada estupenda. Un día 5 estrellas. En cuanto a la vía, encontraremos tramos de roca muy buena, con placas, agujeros, aristas y demás. Aunque alternados con alguna zona de la mue.te, formadas por placas con multitud de bloques apilados unos sobre otros y dónde habrá que extremar las precauciones. Son pocas, pero están ahí. Nosotros sólo llevábamos un martillo y el segundo no pudo limpiar a conciencia. Si algún alma caritativa lo lleva, pasará un buen rato tirando piedras abajo y hará una buena obra. En todo caso, tras algunas repeticiones se notará una diferencia. No confundir vía fácil con happy-flowers… Ya tenemos otro proyecto comenzado por las cercanías.

LA MITRA - DIRECTA A LA ANGLADA-GUILLAMÓN

Ya cuando hicimos el Puro, el pasado año, dudamos entre ese y la Mitra. Para asegurarnos el ir sobrados de tiempo (era tarde) optamos por el primero pero quedó pendiente el segundo. Tras un par de intentos este atípico y frío verano para ir a Vadiello y rematar las tareas pendientes, lo termino cuadrando con Lluis Solá. Empezamos mal y a las 6 de la mañana al coche le da por no arrancar y no arranca. Apañamos con Lluis y vamos en el suyo. Tras la inhumana aproximación por la carrera, de unos 5’, comenzamos por la plaquera y equipada vía Carmen, Bonito itinerario que nos deposita en una suave y limpia arista que conduce directamente a la base de la Mitra propiamente dicha. Los primeros largos corresponden a la Directa. Entre el equipamiento rarillo (ojo con los clavos de inicio) y la roca-barrizal típica de la región. Vamos subiendo como buenamente podemos, y nos deja la maldita muñeca. Con menos libre del que me hubiera gustado llegamos a la repisa dónde se une con la Anglada-Guillamón. A partir de aquí la roca mejora considerablemente (no me lo esperaba) y la vía gana en espectacularidad. A pesar de algún tramo marranote, vamos disfrutando (y resoplando) por las chimeneas, más o menos arrastradas, que conducen a la última reunión. Un balcón sorprendente y privilegiado que nos hace pensar en lo acertado de estar hoy en este precioso lugar. Un último largo nuevamente por la directa (aquí el original de la Anglada se ve realmente impresionante…) y el repechón final de la Anglada nos dejan en la cima. Como viene siendo costumbre en algunos monolitos de los alrededores, un enorme cable rodea toda la cima y sirve de rápel y última role. Ha sido un excelente itinerario que nos ha enseñado un poco más sobre este rincón de la Sierra de Guara y sobre nosotros mismos. Nos ha obligado a esforzarnos y nos ha recompensado con bellos pasos e inmejorables perspectivas. Un pensamiento de homenaje para los aperturistas. La bajada es otra historia y conviene afinar el sentido de la orientación, a parte de llegar arriba holgados de horario, por si las moscas. Parece ser que la mejor opción es rapelar por el mismo lugar, nosotros no lo hicimos así. VVB.